Pablo Hasél
Escucha, te creías que sería tu capricho ¿no? Pues mira, que yo escriba poesía no significa que no pueda mandarte a la puta mierda. Yo no soy ni seré el osito de nadie ¿entiendes? Y menos de una niña pija, antes sería otro tenbandi. Vete a jugar con otra peña, te equivocas de persona. Tu no eres mi amiga no, sólo una puta egoísta. Qué fácil fue decirme "prometo no fallarte" olvidando yo la parte de no creerte, la más importante, se nota que jurar es gratis, yo estoy pagando caro, tu mar en calma que escondía océanos bravos. Qué ingenuo soy cuando me aferro a clavos ardiendo, como si quemaran menos que otro tipo de infiernos. Qué mentirosa fuíste yendo de mosquita muerta dando golpes a mi puerta atraída por mi lado triste. Escondiendo el aguijón adornado con un corazón que me mentía con poesía pero eres fría, todo acabó. Sólo si estás mal me llamas con urgencia, si estás bien no eres quien a prueba de bombas me aprecia. Y besos ya conocí tantos que ni en e
Comentarios
Publicar un comentario